Historia General del Pueblo Dominicano Tomo I

DO S I N N O VADO RA S IN DARAN DI UNTES: M A R T I N E Z A NOAASCO E L P O C O IN T E R E S D E L R E G IM E N por con trolar la expresión d e los historiadores, salvo en las m aterias que le resultaran de utilidad política directa, se exp resó en que otros investigadores pudieran escrib ir sin dem asiadas interferencias visibles. Sobresalieron en tal posición R u fin o M artínez y Sócrates N olasco. do s contem poráneos que se centraron en el siglo x ix . aunque con enfoques d istin tos M M artínez escogió el gén ero biográfico com o m edio privilegiado d e síntesis. Lo hizo prim eram ente en tres libros en los que com para seis personajes sobresalientes. En él se adv ierte un en foque psicológico com o recurso central para el análisis histórico. El prism a de la historicidad no es otro q u e el d e la acción de las figuras q u e pusieron sus sellos en procesos y épocas. Se incorporaba a una problem ática que había ganado un sitial en el historieism o. tocante a la recreación de las m otiv aciones cíe personajes connotados. Tuvo el m érito de adentrarse a través de categorías para el análisis psicológico M En el prim ero d e los libros preten dió tipificar los rasgos cíe la historia política de finales del X Ix a través d e Luperón. I leureaux y D escham ps."1' C o n em patia no disim ulada por I leureaux. en función d e su inteligencia y de lo com plejo de las circunstancias en que se desenvolvió, pese a no ser un conservador, M artínez con travin o certezas de los liberales sobre el proceso político de aquella época. En realidad, no traspaso el um bral del eclecticism o, resultado de lo cual paralelam ente en com iaba la acción de­ libérales com o D escham ps y Luperón. Esa evaluación m atizada sob re las acciones d e personajes controversiales. q u e pudieron ser o b jeto de juicio severo, se definió m ás en el libro cum bre del gen ero biográfico, acerca d e los dos prim eros dictadores d e la etapa republicana.'"" M artínez, los hum aniza al tiem po q u e explica sus actuaciones p o r el en torno com p lejo Sf Una actitud parecida, aunque con el én fasis cíe pon er de relieve los excesos y entreguisnios. fue la utilizada en una biografía m as exten sa d e I leureaux, Es d efendible que. con los años q u e le confirieron m adurez, vario en porción considerable sus conclusiones. La am argura que le deparó la experien cia opresiva del tru jillato d e b ió ir m atizando sus perspectivas. N o pud o ser accidental q u e la segunda biografía d e I leureaux. de ton o crítico, la dejara pend ien te d e publicación, a fin d e colocarla en un tom o con jun tam en te con la de Trujillo. Esta fu e su ultim a gran biografía, y tran sm ite el dram atism o con que padeció la crim inalidad de los treinta y un años, com o sujeto h onesto y de vocación dem ocrática. El rigor del despotism o le im pidió continuar con evaluaciones objetivas- y sim patizantes d e los logros del autoritarism o para el progreso. Esa postrera biograf ía extensa la escribió en secreto nocturno, por m ed io de apuntes diarios d e ton o exacerbado. El libro debía estar casi listo en el m om en to en q u e Iiu jillo lúe elim in ado, pues lo pu b licó pocos añ os despu és'"' M M as la obra cu m b re d e M artín ez fue el p ro d u cto del trab ajo d e toda la vida, un d iccion ario d e figuras sob resalien tes en tre 18 2 1 y 19 3 0 . Es sin tom ático que 110 le interesara la colon ia y q u e decidiera o m itir la época de T rujillo. de seguro para no ten er que en ju iciar a co n o cid o s q u e le m erecían repudio'*" M Só crates N olasco se m ovió mas b ien d en tro de una d im en sión estética, tam bién p ro p ia del h istorieism o recuperado: visualizo la historia com o el escen ario de cxtcrio ri/ació n d e las pasiones elem en tales que atan al in d ivid u o con el paisaje y su co n stitu ció n biológica. El lenguaje de su discurso es literario, por lo que rep resen ta los hechos com o dram as. Tal propuesta se plasm ó en una sim biosis en tre historia y literatu ra.'*' El sesgo artístico d e las estam pas se co m p lem en tó con la n arrativa de cu en tos d e base histórica. En algunos dé­ los textos los g én ero s se rozan N o lasco m anejo com o nad ie la -im agin ació n cread ora- del h istorieism o. au n q u e sin hacer referen cia a esta escuela. Es probable que. m ás q u e m ovid o por un a adscripción académ ica, se d ejara ir por su s inclinaciones a recrear estados efe ánim os y situacion es p o r m ed io del decorado, aten id o con rigor a 1111 len guaje preciosista, dosificado y co n tro lad o a cabalidad 8S El gru eso de la o b ra d e N o lasco tran scurre en tre la Separación y el régim en d e lo s Seis A ños, y A * - ' .< esto es. en tre los añ o s cu aren ta y los seten ta del siglo x ix . El escenario »* prim ordial es el rem oto su ro este, región d o n d e nació y co n cuya gen te y \ V ,W * sct >manejó como naíic fa «imaginación cica- tierra se había com pen etrado M an ejó los personajes con una cercan ía tal Sota» acf fjisíotícismo, aumjuc sm jjaceí íc-^ctcncia a que solo po d ía ser producto del co n o cim ien to íntim o, pero 110 m enos de esta cscuefa [...] ~< 5 f aineso íc fa o6ta íc (JfWasco la destreza literaria. E n con tró p o r allí a su h éro e José M aría C a b ial, por V^ /% ; ; ; líanscutte cnifc fa ‘tjcjjatación j c f ic^imcn íc fos la sim biosis d e su talante flem ático con la arid ez d e la tierra, partícipe en ‘fe c is fiíNáos, esto es, cniic fos años cuaicnta j; fos todas las cam pañas p atrióticas en esas largas décadas, a qu ien la devoción setenta 9cf sigfo x jx . N É f csccnaíio piimoi 9 taf es c f |c hi/.o d e d icar su única b iografía"’" M N o por casualidad, el m om ento temoto sniocstc, ic^.ón 9oníc nac.óo con enrámeme_o estratégico en que discurre su narrativa son los años d e p elea m ortífera ticíta sefafiía compendia*». en tre -ro jo s- y -a z u le s•. en tre 18 6 7 y 1873. q u e registró su ep icen tro en el i : *1 ¿ * '"'R ufino Martínez. / lombrcsdominicanos. Deschamps. Ileureaux. Luperón. Primor tom o Ciudad Trujillo. 1936. Rufino Martínez / lombresdominicano} Santana y Hács. Santiago, 194? Rufino M artínez. I lombrtsdemitiíciiiióím. Irujil/ó y Ileureaux, Santo Dom ingo, 1965. "R u fin o M artm c/. Diccionariobiográjicoliistórico dominicano. 1 $2t jp.jo. Santo Domingo, iy ~3 "L a s dos grandes obras de Sócrates Nolasco son: CuentosdelSur. C iudad Irujillo. 1939 \ ' tejasmemorias. Santiago. 1941 'S ó c ra te s \o\asco.JotfMaría Cabral llguerrero. Sam o Domingo, i 9*>3 i i i M O R i u ; i m k m m 1 i’i 1 m . o n o v i i N K \ \ o tr<\ 9 2 -*V*Í

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